2 de julio de 2024
No levanta cabeza la liquidación de divisas, el primer semestre no alcanzó superar al 2023.
En junio, los ingresos de dólares por exportaciones del agro estuvieron por debajo de mayo y así la primera mitad del año tuvo una variación negativa.
Frente al mismo mes del año pasado. El colchón de dólares que el Gobierno nacional espera por parte del agro para poder apoyar y hacer rebotar la economía, por el momento sigue estando muy delgado.
En junio, según informaron este lunes la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan el 48 % de las exportaciones argentinas, la liquidación de divisas del sector agroexportador fue de U$S 1.977,9 millones.
Este valor, si bien implica una suba del 25% con respecto al mismo mes del año pasado, significa un retroceso del 24% en relación a mayo.
De todos modos, como es usual por la estacionalidad en el ingreso de dólares del agro conforme avanza la cosecha gruesa, junio fue el segundo mes con mayor aporte de 2024.
LIQUIDACIÓN DE DIVISAS: PRIMER SEMESTRE FLOJO.
De esta manera, el primer semestre cerró con U$S 11.024 millones generados por la agroexportación, lo que implica una muy leve baja en relación a los U$S 11.031 millones del mismo período del año pasado.
Este valor está además muy lejos del récord de U$S 19.144 millones con los que se benefició la economía, y el Gobierno de Alberto Fernández, durante la primera mitad de 2022, momento en que se combinaron una buena cosecha y valores internacionales de las commodities cerca de su máximo histórico, en el marco del inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania.
En este punto, de todos modos, hay que hacer una salvedad: los números de 2023 están en cierto modo distorsionados porque en mayo de ese ejercicio el Gobierno anterior dispuso una nueva etapa del “dólar soja” y eso motivó que se adelantaran muchas liquidaciones.
En aquel mes, el ingreso fue superior a U$S 4.200 millones, una cifra inusual para un año en que se desplomó la cosecha por la sequía, más allá de que los precios internacionales eran superiores que en la actualidad. La exportación de granos sigue trabajando con altos niveles de capacidad ociosa, así como la industria aceitera, padeciendo márgenes negativos permanentes.
COMPARTIR:
Comentarios
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!