Sábado 17 de Mayo de 2025

  • 19.8º

19.8°

Rosario

20 de marzo de 2025

La prevención tuvo resultado, la chicharrita casi no hizo ruido en toda la campaña.

Si bien el último informe de la red nacional de monitoreo de este insecto muestra una mayor presencia de la plaga, en el 80% de la superficie sembrada ya no puede hacer daños.

La cosecha de maíz 2024/25 ya está encaminada y la campaña está cerrando con una gran noticia para los productores: la chicharrita del maíz, la plaga que causó estragos en el ciclo anterior y que se temía volviera a provocar problemas en el actual, nunca pasó de una leve señal de alerta.

En las últimas horas, la Red Nacional de Monitoreo de Dalbulus Maidis, el equipo multidisciplinario e interinstitucional que se armó precisamente para prevenir la posibilidad de un nuevo inconveniente grave con este insecto, publicó su 15° informe de la campaña y el panorama no difiere demasiado de lo que ha venido reportando en las últimas ediciones.

La presencia de la chicharrita del maíz ha venido incrementándose, pero no en niveles peligrosos y en un momento de la campaña en que el cereal, por su estadio fenológico, ya no corre riesgos de verse afectado por el complejo de enfermedades que transmite este insecto vector.

EL PANORAMA DE LA CHICHARRITA DEL MAÍZ.

El 15° informe de la Red Nacional de Monitoreo de Dalbulus maidis registró una mayor presencia de la plaga, como era de esperarse para la época del año y el cese del control debido a que más del 80% de los maíces ya superaron la etapa de vulnerabilidad al achaparramiento.

No obstante, los expertos aconsejan continuar con el monitoreo, no solo para preservar a los maíces sembrados más tardíamente, sino también para seguir generando información relevante para manejar la plaga en las próximas campañas.

La buena noticia es que más del 80% de los cultivos de maíz ya está a salvo del complejo de enfermedades que transmite este vector, dado que ya se encuentra en etapas fenológicas reproductivas (R1-R6) o vegetativas tardías (VT), y en algunas localidades del Litoral o las regiones del Centro ya se está cosechando o cerca de hacerlo.

En general se ve que obviamente aumentaron las poblaciones de chicharritas, por la época estival y porque se dejaron de hacer intervenciones químicas de control. Pero este aumento llegó demasiado tarde, cuando ya los cultivos se encuentran fuera de la etapa de susceptibilidad.

De todos modos, el experto insistió en que, de cara al futuro, es importante estudiar qué pasa con la población del vector. Por eso es preciso seguir monitoreando, independientemente de que el cultivo esté protegido: hay que seguir viendo cómo fluctúa en el tiempo la dinámica de esta población, para seguir generando información. Cuanta más información recolectemos, más precisos vamos a ser para la toma de decisiones.

COMPARTIR:

Comentarios

Escribir un comentario »

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!